Escribo también porque cuando me encuentro con el ^demonio^ encabronado no hay quién me aguante, menos quién me entienda. Por qué está dentro de mi, no sé. Me cuesta pensar que mi sarcástica soledad se quedó quieta. Probablemente siempre he sido así de contracorriente, será por terca, o simple satisfacción personal.

Voy a explotar NO

______Espero ______________ ^EXPLOTAR^
No quiero decir que a veces, pero es cierto, me siento como fuera de lugar, tan lejos de donde pertenezco si esque uno de veras tiene raíz para buscar. No quiero decir que todo el tiempo, pero es cierto, intento sentarme a la mesa con todo el día para contar a un par de muros lo que en tan poco tiempo logran olvidar.
De infinitivos sin conjugar se trata mi vida y su relación aparente. Soy un sujeto sin predicado, sin pretéritos de los que quiera echar mano; mas sin embargo, sé que de alguna manera todo tiene sentido cuando me suman sus calificativos, sus circunstanciales al día y por momentos -de veras, de veras- los quiero incluir en mi vida.
Las telas de colores se confunden con su piel, sólo a ratitos el viento le descubre un poco los tobillos.

El cabello lacio le viste media espalda, su castaño oscuro divide justo a la altura de su pecho que no es tan pequeño como la palma de sus manos. Una de ellas rompe el cuadro con el puño cerrado, mientras la otra se eleva a su cuello que hace ligeramente un arco de donde resbalan dos gotas de sal.


Ella quiere dejar de parecer lo que es para serlo totalmente, aunque por ahora se limite a correr entre la yerba de aquel cerro hasta llegar a bordear un abismo no tan profundo como el de su silencio, que quisiera ella explotara como lo hacen el grillo y el coyote al atardecer.

siamo